Veintidós son los centros reunidos en esta publicación editada por la Dirección de Investigación y que fue lanzada en una ceremonia con la participación de la subsecretaria de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación Carolina Torrealba; el rector Ignacio Sánchez y el vicerrector de Investigación Pedro Bouchon.
Desde los átomos a los bits, desde las especies vegetales hasta el ser humano, es la amplia variedad de temas que estudian los 22 Centros Científicos de Excelencia en que la Universidad Católica participa, como institución principal o asociada, con un total de más de 7.600 publicaciones. Todos ellos forman parte del libro homónimo editado por la Dirección de Investigación y que fue presentado oficialmente en una concurrida ceremonia.
“Hemos querido poner en valor la contribución que se hace desde estos centros de desarrollo al país, uno de los ejes específicos de acción de nuestro Plan de Desarrollo, la creación de conocimiento de frontera”, expresó el rector Ignacio Sánchez, y agregó: “Quisiera destacar la calidad de este libro, su información, presentación, datos, figuras, fotografías y, particularmente, los testimonios de los investigadores, que nos permite darnos cuenta de sus motivaciones”.
En estos centros participan más de 1700 investigadores y más de 1600 estudiantes de pre y postgrado. “Ellos son los depositarios de los recursos públicos que permiten crear la investigación que Chile necesita para abordar sus desafíos y avanzar en su desarrollo como país”, agregó el rector, quien también destacó el valioso rol que cumplen en la internacionalización, vinculándose con 287 instituciones de 32 países en el mundo.
Como afirmó la subsecretaria de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación, Carolina Torrealba, es necesario aprender a construir, a mirar la investigación de manera asociativa: “Incomodar y hacer preguntas, asumir liderazgos, ha sido relevante: los centros han logrado permear a la opinión pública”. Y agregó: “Ese valor de crear conocimiento, generar esta organización interdisciplinaria, que piensa más allá y transita entre disciplinas, es lo que tenemos que fortalecer”.
Es por esto que, como explicó la subsecretaria, la nueva institucionalidad de la ciencia permitirá crear un sistema de centros. “La meta es generar una matriz de centros a los cuales apoyar para que, de manera asociativa, muevan las fronteras del conocimiento en áreas nuevas y que nos sorprendan”, afirmó, agregando que se ha desarrollado una línea de trabajo que busca apoyar las iniciativas que surjan de asociaciones entre centros a través de “Vanguardia”, figura que busca generar un nuevo alcance donde éstos sean la base de la matriz.
Por su parte, el vicerrector de Investigación Pedro Bouchon destacó que “este texto permite narrar la investigación que hacemos como Universidad”. “Es un recorrido muy sorprendente que da cuenta de un trabajo colaborativo relevante, sostenido, que se ha ido realizando en los últimos diez años, que ha ido incorporando nuevos actores y que apunta hacia lo que nosotros perfilamos como institución de educación superior de excelencia”, añadió. También relevó su riqueza con respecto a los ámbitos de acción en los que cada uno trabaja y a la diversidad de su estructura; así como su relevancia para fortalecer los vínculos nacionales e internacionales.
Con respecto a los desafíos, el vicerrector afirmó que el principal es responder a la pregunta: ¿Cómo nos interpela el estallido social del 18 de octubre? “No podemos tranzar en nuestra excelencia, pero tampoco podemos estar ajenos a las demandas que hoy día son tan evidentes y que persisten en nuestro país”, dijo. Otros aspectos son la diseminación de conocimiento y la formación de capital humano avanzado, aspectos en los que los centros hacen un gran aporte, pero aún se debe seguir avanzando.
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