Avanza colaboración entre universidades católicas de Perú, Bolivia y Chile

  1. Inicio keyboard_arrow_right
  2. Noticias keyboard_arrow_right
  3. Avanza colaboración entre universidades católicas de Perú, Bolivia y Chile

“Artesanos de la unidad” es el nombre de este programa que busca promover la investigación para impulsar la cooperación entre los tres países vecinos, en distintas áreas. Establecer las bases para el desarrollo de proyectos fue el objetivo de la reunión realizada en Lima, a la que asistió la directora de Investigación y representante de la UC en esta iniciativa, María Elena Boisier.

Dar pasos concretos en el convenio de cooperación entre la Universidad Católica Boliviana “San Pablo”, la Pontificia Universidad Católica del Perú y la Pontificia Universidad Católica de Chile, fue el objetivo de la reunión sostenida por los representantes de estas tres universidades realizada en Lima, el pasado 17 de junio.

El acuerdo, “Artesanos de la unidad” -firmado por los rectores de estas tres instituciones, en enero de 2019- nació en el marco del llamado que hiciera el Papa Francisco en su visita a América Latina, a “tejer la unidad, como una forma de construir la historia”. Su fruto es un Programa de Investigación Académica Conjunto, que estudiará las oportunidades de cooperación científica, educativa, cultural, económica y social, entre las universidades y países participantes.

Como explica María Elena Boisier, directora de Investigación UC y responsable por parte de la UC en la gestión de este programa, en la reunión realizada en la Universidad Católica del Perú se acordaron los próximos pasos, y la metodología de trabajo para empezar a desarrollar proyectos colaborativos y sus áreas.

En concreto, se trata de dos programas. Uno, estará enfocado en el ámbito de la ciencia, las humanidades y la cultura, en temas de interés de las tres instituciones. Y el otro, buscará identificar el potencial de cooperación y complementación económica, social y cultural entre los países involucrados, en base a las agendas de integración de regiones de frontera, y orientado a los temas de desarrollo de pueblos originarios, migración, minería, recursos hídricos y agricultura, infraestructura física, energética y digital, entre otros.

A través de este trabajo conjunto se puede avanzar en la integración cultural y económica entre pueblos hermanos, que tienen propuestas de desarrollo común en varias áreas estratégicas. Las universidades católicas representan un puente de diálogo amplio y un lugar de encuentro en beneficio del desarrollo integral de nuestros países”, afirmó el rector Ignacio Sánchez cuando fue firmado el convenio.

Desde la firma del convenio, los representantes de las tres universidades han desarrollado un intenso trabajo de coordinación, identificando los temas de investigación de interés, los recursos académicos y técnicos, y los futuros pasos para establecer una agenda y estimación de costos para la puesta en marcha de un capital semilla que permita la ejecución de proyectos.

El la reunión participaron, por parte de la Universidad Católica Boliviana, Susan Santillán, oficial de Control Académico; Omar Salinas, director del departamento de Ingeniería Ambiental; Gustavo Fernández, director del Instituto de Estudios Internacionales y encargado del convenio por parte de esta institución. Por su parte, los integrantes de la Universidad Católica de Perú fueron María de los Ángeles Fernández, jefa de la sección de Internacionalización Académica, Dirección Académica de Relaciones Institucionales; Carlos Chávez, director de Gestión de la Investigación, Vicerrectorado de Investigación; Elvira Méndez, directora del Instituto de Estudios Internacionales; Alberto Ferrand, jefe de la Oficina de Desarrollo de Relaciones Institucionales, dirección Académica de Relaciones Institucionales, y encargado del Convenio desde esta universidad. Y la directora de Investigación María Elena Boisier, representante de la UC.

“Este programa es muy relevante para nosotros, para ir generando una plataforma que nos permita promover la investigación en temas de interés para nuestros países, impulsando proyectos conjuntos y creando nuevas posibilidades de intercambio de investigadores en un futuro”, concluye María Elena Boisier.