La Estación Costera de Investigaciones Marinas (ECIM), perteneciente a la Facultad de Ciencias Biológicas de la UC, cumplió 40 años en noviembre pasado. Esta se ha convertido en un importante actor para el estudio de microorganismos, la energía mareomotriz y el calentamiento global, gracias a su modelo pionero en el mundo, con su área protegida para la flora y fauna en el litoral central.
Una de las particularidades de esta estación de investigación de la UC, es que la zona costera aledaña está libre de la intervención humana hace 40 años.
Un kilómetro de costa rocosa y el fondo marino adyacente, más un laboratorio que se encuentra justo al frente, son parte de la Estación Costera de Investigaciones Marinas (ECIM), ubicada en el litoral central. La zona costera aledaña a este lugar está libre de la intervención humana hace 40 años, siendo una de las primeras áreas marinas protegidas de Chile y el mundo.
En esta estación de investigación se estudia desde microorganismos hasta el cuidado parental de grupos invertebrados, proyectos que han llevado al límite el buceo tradicional o que han juntado disciplinas como la biología marina y el diseño.
En noviembre pasado, ECIM -ubicada en Las Cruces, Región de Valparaíso-, celebró su cuadragésimo aniversario con una ceremonia a la que asistieron investigadoras e investigadores de Chile y el extranjero, autoridades locales y de la universidad.
“Esta zona es una de las pocas que hay en la costa sudamericana y por eso tenemos un patrimonio científico de información de datos que es tremendamente valioso para el país y también para el mundo. No hay observaciones de largo plazo en condiciones sin impacto directo humano en todo el Pacífico Sur”- Sergio Navarrete, director ECIM.